Este mes de marzo os presentamos a una persona humilde que ha construído y sigue construyendo su vida a base de mucho esfuerzo. Fue un buen estudiante y empezó a trabajar a temprana edad por exigencias del guión de la vida. Tiene múltiples aficiones que le aportan mucho para su bienestar actual. Es amante del deporte, le gusta el cine de suspense, le encanta la música, se acompaña de una guitarra para cantar, le relaja mucho escribir cosas de la cotidianidad a veces con tintes humorísticos, también ama el sol del invierno porque le hace sentir bien y sobre todo adora y practica la filantropía cuando es menester. Aquí os dejamos con su historia:
Hola amigos. Mi nombre es Pedro, soy de Madrid y ahora soy feliz. Un día me propusieron escribir unas palabras para intentar explicar a todo aquel que me quisiera leer como se puede salir de una situación desesperada en la cual te hallas… y no dude en decir que sí, porque para mí no hay nada más bello y reconfortante que aportar un pequeño grano de arena a alguna persona que esté pasando por un mal momento, para ayudarla a tener una vida mucho más plena y satisfactoria.
Os quiero decir que para mí lo primordial y más importante para escapar airoso de una circunstancia desagradable es: cuidarse y quererse a uno mismo, esto es fundamental, porque sin esta premisa será muy difícil revertir una situación, yo he tenido que aprender a hacerlo para no ahogarme definitivamente en el mar donde estuve sumergido casi por completo. Pero aquí estoy ahora viviendo, porque conseguí encontrar la parte de vida que me correspondía según mis circunstancias personales.
Todo empezó por un problema físico que llevo consigo una intervención quirúrgica y que posteriormente desembocó en una lesión medular con sus respectivas secuelas, pues bien, estuve tres meses sin poder andar prácticamente y para un deportista de pro como yo, esto me supuso un bajón anímico descomunal… estaba hundido no quería saber, no quería mirar, no quería escuchar, todo para mí era infierno y las lágrimas emergían de mis ojos a cada instante… Gracias a la ayuda que recibí y a la parte de optimismo que me toco aportar conseguí huir de la espiral maliciosa que me estaba privando de una felicidad a la que todos tenemos derecho a disfrutar.
No soy quien, para dar consejos, mas sí, aportar mis experiencias. No obstante, me vas a permitir que te regale unas ideas que te podrán facilitar las cosas por si en algún momento te has sentido en el interior de un pozo sin luz.
No te preocupes más allá de lo estrictamente normal, no te dejes nunca avasallar por el miedo, piensa siempre en tus buenas cualidades que, seguro que las tienes, sé positivo, saca siempre lo mejor de ti, recuerda que siempre hay personas que te aman y, por otro lado, hay personas y cosas que tú también amas. Recuerda que para que tu desarrollo vaya en buena dirección has de coger buenos hábitos y desechar o aparcar las cosas que te estresan o te crean malas sensaciones.
Estoy convencido que cada persona, si quiere, se puede adaptar al estilo de vida que en cada momento le toca vivir, es por esto, que os pediría que valorarais la hermosa vida, que ahora a lo mejor, no sois capaces de ver, porque si extraéis de vuestro interior las virtudes y habilidades que poseéis, vuestra vida se tornará en plena y saludable.
Por favor, hacerlo por vosotros: ¡¡SED FELICES!!
